Tras el exhaustivo análisis que mis compañeros y yo hemos realizado a los libros de primaria de nuestros niños, creo que hay varios aspectos que en mi opinión se podrían mejorar.
Se tendrían que ofrecer una mayor variedad de actividades, que en muchas ocasiones podrían llegar a ser muy repetitivas y poco creativas; también he echado de menos la falta de propuestas grupales, ya que todos los ejercicios eran muy individualistas.
Pero no son todos fallos lo que hemos observado en los libros, sino que también hemos encontrado muchos aspectos muy favorables para los niños como la progresión de los contenidos según avanzan los cursos, la adecuación de los textos que se emplean, y sobre todo el uso de las nuevas tecnologías como herramientas educativas que tan importante es en el día a día de todos los alumnos, que les ayudan a interiorizar mejor los contenidos académicos que se trabajan en clase.
Mi experiencia personal ha sido muy gratificante, porque aunque ha sido un laborioso y repetitivo trabajo, me ha dado la oportunidad de situarme tanto en el papel del profesor como en el del alumno.
Como futuro profesor he tenido la necesidad de cambiar algunos aspectos como ya he comentado anteriormente.
Creo que el profesor debe saber adaptar el libro a los alumnos y no al contrario, y si los libros tienen algunas carencias, sean los profesores quienes aporten nuevas ideas y actividades para involucrar a los alumnos de la forma más adecuada en el tema que se está trabajando.
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